Verdades varias

La vida está llena de pequeñas alegrías; el arte consiste en saber distinguirlas.
Li Tai Po, poeta chino







13 Mar 2010

Música para mis oídos

La travesía del día de hoy fue ir a ver a Gustavo Cerati al Festival "Argentina abraza a Chile" (sólo para que quede registrado, no me interesa un corno Chile, sólo lo hice por Gus). El viaje no tuvo mayores sobresaltos, salvo porque tuvimos que cruzar el puente de Liniers con May, cosa no demasiado agradable. Pero llegamos a tiempo para el inicio del recital, que es lo más importante.
Como Gustavo se retrasó un poco, León Gieco y Gustavo Santaolalla subieron al escenario y cantaron juntos "Pensar en nada" y "Mañanas Campestres". Los hippies asistentes, agradecidos, pero May y yo frekeándonos porque queríamos ver al otro Gustavo. Por suerte, el percance duró sólo dos canciones.
A las 16:50, Cerati pone sus pies sobre el escenario vestido con camisa azul oscura, jeans, botas, un sombrero y un par de lentes. ¿Hace falta decir que es hermoso? Agradeció a todo el público por su presencia y su colaboración e inmediatamente después comenzó el show.
La "playlist" inició con "No te creo", del álbum Siempre es Hoy, para luego seguir con "Avenida Alcorta"; "Uno entre mil" vino después, Mayra y yo con sonrisa de oreja a oreja, pero como Gus siempre tiene un as bajo la manga, nos hizo aún más felices cantando "Rapto".
Llegó el momento de presentar a alguien especial: Andrés Calamaro (hasta el 20 de diciembre de 2009, el que reía último, reía mejor), junto con quien cantó "Crimen" y "Trátame Suavemente" (¡SODA STEREO CARAJO!). No puedo halagar la presencia de Calamaro porque sinceramente fue un asesinato de canciones en cadena. Calamaro ya no puede cantar, por favor no lo inviten más a hacerlo.
Tras el segundo percance de la tarde, fue momento de "Pulsar", que siempre llega justo a tiempo. Obviamente, en este festival Gus hizo "La Excepción" y cantó "Dejá Vú", remontándonos inesperadamente al 20 de diciembre. ¿Y qué mejor manera de volver a decir gracias por venir que cantando "Puente"? El cierre con "Lago en el Cielo", mágico e inmejorable.
Tras eso, May y yo nos pasamos una hora entera caminando sin rumbo, hasta que decidimos que era una mejor idea tomarnos un taxi hasta Plaza Italia. Una vez allí, nos metimos en un M D para tomar un café y un jugo, para luego tomarnos el colectivo que nos traería de vuelta al colindante Oeste.
Ya desde la comodidad de mi hogar, puedo decir que fue una divina tarde con mis amores Gus y May.

1 comment:

Coffee's for closers said...

Gustavo, hermoso. Vos, hermosa. Pasar la tarde con vos, hermoso. Yo, embobada y pelotudísima. Y la próxima es noche de boliche en boliche (?) Te adoro pumpkin ♥